La Real Academia de la Lengua define estético como artístico, de aspecto bello y elegante. Podríamos entrar entonces a cuestionarnos qué es la belleza, y profundizar en discusiones filosóficas. De todas formas, como soy de la opinión, que como dice mi jefe, “el sentido de la estética, se tiene o no se tiene”, abandonaremos las definiciones y nos centraremos en el trabajo de Outumuro para entenderlo, porque este artista ensalza una estética ante la cual no hay debate que valga.
Poco conocía yo de este fotógrafo hasta hace unos meses. Los periódicos me informaron semanas atrás de la exposición en Barcelona de “Outumuro Looks. Vint anys fotografiant moda”. Leo entonces que este artesano de la imagen, como él mismo se define, nacido hace 60 años en Ourense, pero formado profesionalmente en la ciudad condal, ha sido uno de los personajes destacados en la evolución de la moda en este país, acercándola con su cámara al público, ayudándose de celebrities, y consiguiendo así conjugar la seducción de las marcas, y el carácter de las modelos.
Esta mañana he visto el resultado. Seis salas muestran la belleza de su trabajo. No hay foto que no te hable, no hay imagen que no te persuada. 200 fotografías puras y nítidas, donde rostros, poses y vestidos se fusionan para expresarte la identidad de cada marca. Armonía y hermosura en cada una de ellas.
La exposición se divide en seis espacios: Entornos, donde un bañador de Guillermina Baeza se cuela en el cosmopolita Tokio, y un vaporoso vestido de Hermés se adentra en el Victoria and Albert Museum de Londres; Retratos, en los que las manos de, una más que nunca reflexiva Laura Ponte, nos presentan unos anillos de Vasari, y donde unos intensos ojos desconocidos sucumben bajo un enorme sombrero de Equis; Blanco y Negro, donde Outumuro juega con ambos colores, para crear figuras geométricas, y provocar contrastes a veces modernos, a veces sensuales, en los que destaca el esplendor de Eugenia Silva o el futurismo de Rossy de Palma; Secuencias, en las que capítulos de películas le sirven para encuadrar los estilismos que quiere mostrarnos, y vemos de nuevo Pájaros o Deseando Amar, y nos creemos a Eduardo Noriega o a Judith Mascó en diferentes instantáneas divertidas. Con Poses y Actitudes, y con Celebrities, el artista se centra en la fuerza de los rostros y de los movimientos para realzar el carácter de las marcas, y no hay en estas fotos modelo que se le resista, porque no sé si están todas las que son, pero desde luego, si son todas las que están.
Siempre he pensado que los entornos y detalles son algo básico en las exposiciones. “Outumuro Looks” se encuadra en el espacio Disseny Hub Barcelona (DHUB), en la calle Montcada, en pleno acogedor barrio del Born, donde unas salas teñidas de azul, unos techos con vigas de madera y dibujos detallados, unos espejos que juegan a puertas, y unos marcos sobrios y limpios, permiten que las fotos luzcan con más fuerza.
Me he quedado asombrada ante tanta perfección, ante tanto estilo. No hay duda que las modelos son guapísimas y las piezas espectacularmente elegantes, pero es ese sentido de la estética, que se tiene o no se tiene, lo que guía a Outumuro , y le permite exprimir la materia prima, dando paso a un resultado realmente bello.
P.D.: me cuenta mi hermana que Outumuro también ejerce de realizador de spots, que ella ha rodado con él. En la exposición también gozamos de un video de I.Coixet que dedica a la muestra.
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