Le ayudé a meterse en esa bañera inhóspita. El bendito ritual de llegada. Aseados antes de devolverlos, que no se diga.
Bailaba miedo, no sonreía, sus ojos buscaban aferrarse a algún punto que no encontraba. Consiguió sentarse y agarró con fuerza sus rodillas. Su cuerpo era enjuto, oscuro, decir famélico sería incluso . . . → Read More: El desagüe