Una tiene la costumbre (aquí cada cual que ponga el adjetivo que guste: santa, buena, mala, tonta, yo no lo tengo claro) de, cada cierto tiempo, tomar cariño a un personaje público vivo (a los muertos también, pero en este post no vienen al caso) para, sin prisa pero sin . . . → Read More: Y Dios bajó a los infiernos…