2013.

Se acaba el año y nos da por hacer listas, de los mejores momentos, los de uno o los de la vida en general, de libros, de discos, de rupturas y bodas, de los que se fueron, de propósitos para el siguiente…Yo este año no consigo concentrarme en ninguna propia, y me interesan poco las del resto, o al menos no esas públicas que nos ofrecen periódicos y programas de televisión.

Intento hacer repaso (de lo mío, que lo mal que ha ido el mundo, o en particular Ejjjjpaña, de hecho, nos queda lejos, y lo que nos toca son nuestras cuatro paredes y esos círculos en los que jugamos a divertirnos, aprender, o lo que sea que creamos que es la vida). Y me pasan imágenes por delante que no se quedan quietas. Intento hacer repaso y me achuchan sobre todo sensaciones, de esas que definimos como “buenas”, o no tan “buenas”, pero que a base de ponerles razón sabemos que nos servirán si conseguimos identificarlas, de esas que algún día diremos que nos ayudaron a crecer (que parece que la costosa evolución interior no se acaba nunca, por diooooooos!!).

Y trato de ponerles nombres, de fijarlas, de tomar esas instantáneas que me sirvan para hacer el inventario magnífico que sirva de resumen, que me deje tranquila, que es para lo que al final sirven las listas, para creer que has tenido bajo control, al menos durante una milésima de segundo, parte de tu tiempo, o de tus emociones. Y no lo consigo.

Serán problemas de concentración (que se resolverán gracias al regalo de mi gurú), o quizás es que no quiero, por miedo, por pereza, o porque simplemente me conformo con ese mix de sonrisas y de nudos en el estómago, esa mezcla de vértigo y satisfacción que me conquista y me confirma que este 2013 no ha pasado en balde, y que será el tiempo el que me ayude a definir, con las perspectiva de un pasado que hoy aún está demasiado caliente, y que a lo mejor ya mañana, ya en 2014, empieza a clarificarse. Así de fácil.

Tal vez me baste con asumir que este año que dejo, en el que he tomado decisiones importante que aun no sé dónde van a conducirme pero que he optado por descubrirlo, en el que también he pospuesto otras, por no saber lo que quiero, o por el miedo a soltar o a arriesgar y no saber gestionar lo que pase,  lo que sienta, un año en el que he averiguado cosas de mí que quiero cambiar pero (de momento) no lo consigo, un año que voy a echar de menos y que hoy despido dándole las gracias por haberme acercado  a mí misma, que parece una tontería pero no lo es.

Y como una no se acerca a ella misma por arte de magia, sino gracias a un montón de momentos compartidos, en los que el espejo te obliga a ponerte delante y dejar las caretas, pues toca dar las gracias a todos aquellos, a todos vosotros que los habéis vivido conmigo, o me habéis hecho sentir estos momentos que han dado forma a un 2013….extraño, bueno, chulo, inquieto, nice, valiente, inseguro, alegre, cariñoso, insómnico (me la acabo de inventar), concienzudo, sanador…?? ……Había dicho que pasaba de listas, no??

PD.:  y vaaaa……feliz año y que el 2014 sea…sobre todo…..GENEROSO!!!!!!

Deja un comentario

Puede utilizar estas etiquetas HTML

<a href="" title=""> <abbr title=""> <acronym title=""> <b> <blockquote cite=""> <cite> <code> <del datetime=""> <em> <i> <q cite=""> <s> <strike> <strong>